Entre los elementos que ayudan a ahorrar tiempo en las tareas de un hogar está la secadora, ¿cómo utilizar mejor las secadoras? Aunque muchos piensen que es algo básico, la realidad es que hay quienes no cumplen con el proceso adecuadamente.
En este artículo se explican algunos trucos para sacarle el máximo provecho a una secadora. Además, se muestra qué no hacer con este útil electrodoméstico.
Consejos perfectos sobre cómo utilizar mejor las secadoras
¿Por qué es tan importante saber cómo utilizar mejor las secadoras? Seguir las recomendaciones adecuadas ayuda a mantener estas máquinas en perfectas condiciones. Además, se alargan sus vidas útiles y se evita que consuman energía en exceso.
Para dar un uso óptimo al electrodoméstico, se recomienda seguir los pasos que se describen a continuación:
1. Adaptar la temperatura teniendo en cuenta el tipo de ropa
Las secadoras más modernas cuentan con sistemas que detectan la humedad de las prendas de vestir. Cuando lo hacen, la temperatura se adapta al tipo de tela y se programa el tiempo adecuado para el secado.
Quienes no tienen secadoras con estos sistemas aún pueden seguir aplicando este paso, ¿cómo? Lo primero que deben hacer es mirar la etiqueta de la ropa para saber las condiciones de secado ideales. Cuando lo hagan, determinan cuánto tiempo tarda en secarse y, de ser posible, ajustan la temperatura manualmente.
2. Aplicar medidas que ayuden a ahorrar energía
Al igual que las lavadoras, las secadoras tienen una capacidad máxima que es necesario tener en cuenta al usarlas. Se sugiere que se deje libre el 20 % del tambor de la máquina para que esta no se vea en la necesidad de esforzarse de más y, por tanto, consumir más energía.
Cuando se escoja cuántas prendas de vestir llevar a la secadora, se tiene en cuenta lo siguiente:
- Cuáles son los tejidos.
- La ropa que está mojada tiene un peso mayor.
Excederse en la carga de la secadora aumenta el consumo energético y hace que la ropa se arrugue y se desgaste con más rapidez.
3. No tardar mucho en retirar la ropa del tambor
Cuando el ciclo de secado termina, se aconseja no dejar las prendas de vestir por mucho tiempo en la secadora. La humedad que se condensa en el tambor puede hacer que la ropa se vuelva a humedecer.
4. No olvidar el mantenimiento de la secadora
Las secadoras con bombas de calor cuentan con auto-limpieza, aún en estas es necesario dedicar unos minutos a la limpieza manual. La importancia de lo anterior aumenta cuando la secadora no tiene un programa de limpieza automática. Si no se hace, los residuos bloquean el condensador de agua y se produce moho.
Lo mejor es que después de usar la secadora se dediquen unos pocos minutos a limpiar rápidamente el condensador y los filtros. Esta tarea sencilla contribuye al aumento de la vida útil del electrodoméstico y a la disminución del consumo de energía.
Cuando los filtros están sucios, la corriente de aire es incorrecta y la máquina trabaja a máxima potencia.
Errores que se cometen en las secadoras
Además de los pasos que se explicaron antes, entre los datos sobre cómo utilizar mejor las secadoras están los errores a evitar. Los más comunes son los siguientes:
- Introducir prendas de vestir manchadas
La primera equivocación es no revisar la ropa que pasas desde la lavadora hasta la secadora. Es de gran importancia asegurarse de que cada prenda esté libre de manchas, tanto al derecho como al revés.
¿Qué pasa si se introduce una prenda de vestir manchada en la secadora? El aire caliente de la misma la fija a la tela, después de eso, es difícil eliminarla y hasta se adhiere al tejido permanentemente.
- Usar la secadora en todo tipo de ropa
Algunas personas piensan que las secadoras dañan las prendas de vestir, pero esto solo sucede si no aplicas los cuidados necesarios. La ropa que tenga perlas, lentejuelas o elementos similares no debe ser secada en la máquina.
Los materiales como la goma (bolsos y calzado) y la espuma tampoco se introducen a la secadora. Para saber qué prendas no secar en ella, se lee la etiqueta, si aparece un círculo dentro de un cuadro y sobre él una cruz, no es apta para secadora. Esto aplica para el lino y el algodón puro.
- No clasificar la ropa según su tejido
Lo ideal es que dividas la ropa por el tipo de material del que están hechas. Como se mencionó antes, los tejidos necesitan diferentes temperaturas y tiempos de secado.
Las prendas de vestir también se pueden separar por colores (oscuros y claros), de esa forma, se evita que destiñan y manchen otras.
- No escoger bien el suavizante que se usa
Existen suavizantes con aromas que se vuelven desagradables cuando tienen contacto con el calor de la secadora. En caso de que esto suceda, se cambia de aroma de producto o incluso de marca.
Tampoco se debe utilizar demasiado suavizante en las prendas de vestir, pues los residuos de este producto quedan tanto en la lavadora como en la secadora. Los restos de suavizantes se acumulan en el sensor de humedad hasta que lo atascan.
- No utilizar el programa Eco
Con el objetivo de que se consuma menos energía, las funciones Eco duran más tiempo. Cuando se dan cuenta de lo que indica el temporizador, muchos cambian de programa. Esta es una equivocación muy común al usar tanto las lavadoras como las secadoras.
- Activar la secadora y salir de casa
Muchas personas, sobre todo las que no tienen mucho tiempo libre y deben salir a trabajar, encienden la máquina y salen. Sin embargo, no se aconseja hacer esto, pues puede generarse un cortocircuito o una fuga de agua.
Conclusiones
En este artículo se ha explicado cómo utilizar mejor las secadoras y qué no hacer con ellas. Sin duda, tener en cuenta esta información es de gran importancia porque, si se aplica, se alarga la vida útil de la máquina y se disminuye el consumo energético. Si has seguido los pasos anteriores y ves que tu ropa sigue mojada, entonces puedes mirar cómo arreglar la secadora.